Viajar a la República Dominicana
República Dominicana es uno de los países más económicos si queremos viajar a la zona del Caribe, pero no por eso es menos interesante que otros sitios. Cuenta con hermosas playas en más de 1.500 kilómetros de costa, calor todo el año, copas de colores, grandes hoteles, campos de golf y un entorno natural inigualable.
Sin duda, lo mejor es su gente acogedora que da la bienvenida a sus visitantes con el ímpetu del merengue, bachata y reggaeton. El país ocupa los dos tercios en el este de la Isla de la Española, teniendo como vecino, en la zona occidental, a Haití.
Fue en su territorio que Cristóbal Colón desembarcó por primera vez en las Américas , y se cree que los restos mortales del navegante estén enterrados en El Faro a Colón, el faro situado en la capital, Santo Domingo.
Siendo el punto geográfico desde donde España inició la conquista del nuevo continente, la ciudad guarda una zona colonial, de calles adoquinadas y edificios históricos que vale la pena visitar. Pero también tiene aires modernos y una agitada vida nocturna, con restaurantes y bares que sirven buena comida a precios justos.
Y el contacto con el agua azul turquesa y fina arena de las playas del Caribe está allí cerca, a 30 kilómetros del Centro, en Boca Chica, playa protegida por una barrera de coral.
Pero es hacia el extremo este de la isla, a 217 kilómetros de la capital, donde casi todo el mundo quiere ir. Punta Cana es un escenario de playas magníficas, repletas de cocoteros agitados por vientos fuertes, y arrecifes de coral que dejan las aguas tranquilas, perfectas para explorar la vida marina haciendo snorkel.
Resorts gigantescos , son más de treinta en la región, se concentran alrededor de bares, restaurantes, casinos y discotecas, sin contar que algunos tienen espléndidos campos de golf .
Ya en la costa noreste de la República Dominicana, se encuentra la Península de Samaná y sus playas prácticamente vírgenes. El mayor atractivo del lugar es entre diciembre y abril, con el espectáculo de las ballenas jorobadas, que llegan desde el Atlántico Norte hasta allí para el nacimiento de sus crías.
Cómo llegar
Algunas rutas comunes para llegar a destinos populares como las de Punta Cana (PUJ) y en la Península de Samaná (Aeropuerto de El Catey, AZS) son las que pasan por Panamá (Copa Airlines), Bogotá (Avianca) y Estados Unidos (Tam, American Airlines y United). Desde España hay una gran cantidad de vuelos para llega a la isla caribeña.
Cómo moverse
La isla de la Española es bastante grande, y las distancias pueden llegar a ser un tanto largas si se prefiere utilizar un coche de alquiler o autobús. De Santo Domingo a Punta Cana son unas 3h30 de viaje, y de allí a Samaná son más de 5: 30.
Compañías como Caribe Tours, Metro y Expreso Bávaro hacen estos recorridos con salidas regulares. También hay vuelos domesticos, muchas veces operando con chárters, pero las salidas sólo son frecuentes durante la temporada alta.
Cuándo ir
Agosto y septiembre son los meses más propensos a huracanes, y cuando buena parte de los resorts ofrecen grandes descuentos. Desde diciembre a febrero y las vacaciones de verano en los Estados Unidos (julio y agosto) son la temporada alta, cuando es más difícil hacer reservas y los precios se encuentran más altos.
La temporada de lluvias depende de la región del país. En el norte las precipitaciones son mayores en invierno (diciembre a febrero), mientras que en el sur el cielo está más nublado de mayo a junio y de septiembre a noviembre.
Qué hacer
En Santo Domingo, una ciudad cuyo centro histórico está declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, el turista encontrará muchas atracciones relacionadas con la cultura, la arquitectura y la historia.
Otro gran atractivo en la República Dominicana es el mar. Son cerca de 1500 km de playas, decenas de ellas excelentes para la práctica de deportes como kitesurf , navegación a vela, y windsurf. Además, la pesca (en el mar, se destacan las barracudas y peces-espada; en la tierra, las truchas del Lago de Hatillo) y el buceo libre o autónomo, son también muy populares.
Será también junto al océano que el visitante tendrá a su disposición islas paradisíacas como Cayo Levantado, Isla Saona e Isla Catalina, ideales para disfrutar del snorkel junto a los arrecifes de coral.
Para quienes gustan de la acción, existen variedad de actividades deportivas y de aventura muy populares como el rafting y el piragüismo, con cauces de alto nivel en el río Yaque del Norte. También hay excursiones en 4×4 desde Samaná, Bayahíbe y Punta Cana, observación de ballenas jorobadas de enero a marzo y hermosas cascadas como el Salto de Jimenoa y el Salto El Limón (Samaná).
Santiago de los Caballeros, en la denominada zona del Cibao, es la segunda ciudad en importancia del páis, y merece una visita durante nuestra estancia en el país dominicano.
Dónde alojarse
En Santo Domingo el visitante tendrá a su disposición hoteles y hostales de estándar internacional, incluyendo los establecimientos de varias banderas conocidas. Lo ideal es permanecer cerca del Centro Histórico, para aprovechar bien los paseos.
Ya en la Península de Samaná y Punta Cana la opción obvia recae sobre resorts todo incluido, que ofrecen el paquete completo: confortable alojamiento, restaurantes variados, muchas opciones de ocio, espectáculos nocturnos, bares y campos de golf, todo junto al mar.
Dónde comer
La cocina dominicana es predominantemente criolla, una encrucijada de sabores e ingredientes procedentes de África, Europa y los habitantes nativos. El resultado es una mesa muy similar a los demás países latinoamericanos, principalmente a los de la costa del Caribe.
Guisos como el mofongo y el sancocho, el yaniqueque, la arepa dominicana (una galleta de harina de maíz) y el chicharrón (pollo frito) pueden ser encontrados con mayor frecuencia en los restaurantes locales.
Qué comprar
Santo Domingo es el principal destino de compras del país, donde hay buena oferta de prendas de vestir, sombreros, joyas y artesanía típica. Allí encontrarás algunos de los centros comerciales y mercados de la calle, así como hay algunas opciones en destinos más alejados. El ron y los puros son artículos muy apreciados.